Levítico 4:32 Y si por su ofrenda por el pecado trajere cordero, hembra sin defecto traera.
Lucas 13:29 Porque vendrán de Oriente y de Occidente, del Norte y del Sur, y se sentaran a la Mesa en el Reino de Dios.
CRISTO LISBET
EN ELLA HABITA TODA LA PLENITUD DE LA DEIDAD.
¡Mirad cuan delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía! Porque allí envía Jehova Bendición y Vida Eterna. (Ref. Salmos 133:1,3)
PARTES DEL ESCRITO.
El secreto está en hacer morir al hombre terrenal y vivir de acuerdo al hombre espiritual para llegar a ser igual a Dios MelquisedecLisbet.
Veamos cómo Cristo Lisbet llega a vivir en nosotros.
- Al nacer de nuevo y permanecer pegados a las enseñanzas de vida de Cristo Lisbet, la Vid Verdadera.
- Al tener nuestro templo limpio y puro, y gobernar la mente con la sabiduría espiritual de Cristo Lisbet.
- Al vivir a imagen y semejanza de Dios MelquisedecLisbet, llevando buen fruto para Dios.
- Al vivir como vive Cristo Lisbet, en rectitud, orden y santidad, siéndole fiel a Dios Padre en todo tiempo.
Juan, capítulo 15 está lleno de sabiduría y nos da claras instrucciones de lo que Dios MelquisedecLisbet piden de nosotros.
Juan 15:4-5 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5 Yo soy la Vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva fruto; porque sin mí nada podéis hacer.
ELLA ES LA SABIDURIA PERSONIFICADA.
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TEXTO COMPLETO DEL MANA
Amados Padres MelquisedecLisbet, qué honor y gozo poder ser enseñados y educados por el Libro de la Vida, la Sabiduría Personificada, Cristo Lisbet. Es con temor reverente y mucho agradecimiento que envío este escrito que han puesto en mi mente.
YA NO VIVO YO, VIVE CRISTO LISBET EN MÍ
Amados hermanos, ministros llamas de fuego de Cristo Lisbet, qué gran privilegio tenemos de conocer al Dios Vivo en su totalidad, al Ellos compartir Su sabiduría con nosotros. A todos nos han dado la misma labor: ser luz a las naciones. Somos los únicos que tenemos el poder para llevar sanidad al mundo al ser ejemplos de Su palabra de amor. Nos han venido preparando para esto, limpiando nuestra mente, ayudándonos a reconciliar a las dos naciones y diciéndonos que dejemos atrás todas las viejas costumbres, que nos extendamos hacia adelante, prosiguiendo a la meta de llegar a la estatura del varón perfecto Cristo Lisbet. Lo cual es posible si permanecemos pegados a Ella, la Vid Verdadera.
Nuestra Madre nos ha dicho que Ella es celosa y solo le da a Dios Padre lo perfecto. Por lo tanto, debemos estar limpios y sin mancha para darle sacrificio vivo y santo. Esto lo podemos lograr al seguir las palabras de Cristo Lisbet, que vive y habla según el Espíritu Santo.
Qué privilegio poder decir con veracidad como dice: Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, más vive Cristo en mí”.
El secreto está en hacer morir al hombre terrenal y vivir de acuerdo al hombre espiritual para llegar a ser igual a Dios MelquisedecLisbet.
Veamos cómo Cristo Lisbet llega a vivir en nosotros.
- Al nacer de nuevo y permanecer pegados a las enseñanzas de vida de Cristo Lisbet, la Vid Verdadera.
- Al tener nuestro templo limpio y puro, y gobernar la mente con la sabiduría espiritual de Cristo Lisbet.
- Al vivir a imagen y semejanza de Dios MelquisedecLisbet, llevando buen fruto para Dios.
- Al vivir como vive Cristo Lisbet, en rectitud, orden y santidad, siéndole fiel a Dios Padre en todo tiempo.
- Juan, capítulo 15 está lleno de sabiduría y nos da claras instrucciones de lo que Dios MelquisedecLisbet piden de nosotros.
Juan 15:4-5 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5 Yo soy la Vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva fruto; porque sin mí nada podéis hacer.
Está claro que sin Cristo Lisbet nada somos, es necesario que Cristo Lisbet sea la que viva en nosotros, la que gobierne nuestra mente con sus palabras de amor, para poder llevar fruto agradable para Dios.
Juan 15:10 Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de Dios Padre, y permanezco en su amor.
El que Cristo viva en ti no es solo porque tú creas que Cristo es la Esposa de Dios y que son dos en uno y basta. Para que Cristo viva en nosotros toma mucho más que eso. ¿O crees que puedes seguir tomando decisiones en tu vida que te llevan a vivir en desorden y nada se demandará de ti? Ya no podemos pensar de esa manera ni vivir en desorden.
Cristo Lisbet demanda que guardemos sus mandamientos. Esto es algo a lo que no estamos acostumbrados y eso se debe a que nunca hemos estado ante el verdadero Dios viviente, escuchando Su Palabra para poder saber qué es lo que necesitamos hacer para complacerlos y adquirir Su regalo de la vida eterna. ¡Amén, Aleluya!
Es necesario vivir en el Orden de MelquisedecLisbet, que implica escuchar atentamente, retener la enseñanza y obedecer los mandamientos que recibimos de Cristo Lisbet. Utilizando las armas que nos han dado para vencer, vistiéndonos con la armadura de Cristo Lisbet, para poder reconciliar a los dos pueblos con amor. Porque Dios nos ha cumplido su promesa de hacer de esas dos naciones que están en nuestra mente, una. Como dice Dios a través del profeta Ezequiel.
Ezequiel 37:21-22 21 tomaré a los hijos de Israel de entre las naciones; 22y los haré una nación en la tierra, en los montes de Israel, y un Rey y una Reina serán a todos ellos por Rey y Reina; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán divididos en dos reinos.
Gracias a Cristo Lisbet esto se ha cumplido hoy, porque Ella es la única que ha traído la paz de Dios a nuestras mentes. Derribó la pared intermedia de separación, siendo la primera en abolir en su propia carne las enemistades, haciendo la paz para crear en sí misma de los dos un solo y nuevo hombre creado por voluntad de Dios y no de los hombres terrenales.
Gracias a esa reconciliación en sí misma, todos ahora tenemos entrada por un mismo Espíritu a Dios Padre. (Efesios 2:14-18; Juan 1:12-13). Nadie excepto nosotros tiene este extraordinario regalo, porque ninguno de los hombres en este mundo ha sido capaz, ni pueden hacer la paz como lo hace Dios Madre, la Espíritu Santa Cristo Lisbet. Y es porque todos los hombres viven satisfaciendo a los deseos engañosos de la mente carnal, cuando los designios de la carne son enemistad contra Dios; no se sujetan a la ley espiritual de Dios, ni tampoco pueden. (Romanos 8:7).
Pero Cristo Lisbet sí puede hacer que se sujeten, porque Dios Padre se lo prometió, diciéndole: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies. (Salmos 110:1). Solo Cristo Lisbet ha puesto a sus enemigos por estrado de sus pies y ahora Reina sobre la totalidad en su mente.
Y si hacemos como Ella, entonces también reinaremos sobre la totalidad en nuestras mentes y pondremos a nuestros enemigos por estrado de nuestros pies. Porque si hacemos la voluntad de la carne y de los pensamientos que turban la mente, nos convertiremos en hijos de ira. (Efesios 2:3). Por lo tanto, es mejor que la Palabra, Cristo Lisbet posea nuestra mente porque Ella es verdadera, honesta, justa, pura, amable, de buen nombre; virtuosa y digna de alabanza, es por eso que siempre debemos meditar en Su Ley. Haciendo esto venceremos a nuestros enemigos, porque la paz de Dios MelquisedecLisbet que sobrepasa todo entendimiento, guardará nuestros corazones y nuestros pensamientos en Cristo Lisbet. (Filipenses 4:7-8). Eso es un hecho.
Una vez hemos escuchado las palabras de vida eterna, Cristo Lisbet y hemos creído en Ella y en quien la envió, se nos demanda rectitud, orden, santidad y pureza, porque Dios MelquisedecLisbet son así. Y cuando hay que tomar alguna decisión, debemos presentarla delante de Dios MelquisedecLisbet y esperar pacientemente Su sabio consejo que es justo y perfecto.
Nuestra Madre nos ha dicho que Ella ha compartido Su sabiduría con nosotros para que tomemos buenas decisiones, pero las palabras claves en esa oración son “ha compartido Su Sabiduría”. O sea, que, de acuerdo al conocimiento adquirido, sigamos su ejemplo, sus instrucciones y su buen proceder al tomar decisiones. Es pensar: qué haría Cristo Lisbet, qué diría Cristo Lisbet, cómo lo haría Cristo Lisbet; sin precipitarnos, sino haciendo todo con paciencia y con calma, usando bien el armamento.
Al hacer esto, claro que el resultado será bueno. Es así como demostramos que Cristo vive en nosotros, que ya morimos a nuestra mente carnal y es Cristo Lisbet la que mora en nuestro templo y lo gobierna a través de Sus palabras de verdad, pureza, amor, paciencia, sabiduría y dominio propio; que nos llevan a vivir vidas ordenadas y agradables delante de Dios MelquisedecLisbet.
Todas estas cosas nos permiten ir alcanzando madurez espiritual y nuestro estilo de vida cambia. Una vez esto sucede, todo lo que pedimos se nos será dado, porque pedimos con justicia y sabiduría, conforme a la voluntad de Dios.
Cristo Lisbet dice en: Juan 15:7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Hemos sido educados y recibido el conocimiento, la sabiduría de Dios. Por lo tanto, se nos demanda vivir correctamente, en orden, con respeto hacia Dios. No podemos decir que Cristo vive en nosotros y comportarnos como bastardos en vez de como hijos que tienen a Dios MelquisedecLisbet como sus Padres espirituales que los instruyen en el camino de vida. Por eso en su gran amor, MelquisedecLisbet nos disciplinan para ayudarnos a llegar a esa anhelada perfección de ser hechos a imagen y semejanza de Dios Padre y Madre.
Dice en: Proverbios 15:32 El que tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; mas el que escucha la corrección tiene entendimiento.
Porque si soportas la disciplina de Dios, nos tratan como hijos suyos, porque ¿qué hijo es aquel a quien sus padres no disciplinan? Pero si se nos deja sin su disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces somos bastardos, y no hijos. (Hebreos 12:7-8). Y cuando somos hijos obedientes, nuestros Padres espirituales son poderosos para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros. (Efesios 3:20).
Y nosotros, los que no menospreciamos nuestras almas decimos: Vive Jehová MelquisedecLisbet que han redimido nuestras almas de toda angustia. Nuestra alma espera a Jehová; MelquisedecLisbet, nuestra ayuda y nuestro escudo son Ellos.” (Salmos 33:20).
Ellos son quienes preservaron la vida a nuestra alma, y no permitieron que nuestros pies tropezaran. (Salmos 66:9).
Porque Jehová MelquisedecLisbet redimen el alma de sus siervos, y no serán condenados cuantos en Ellos confían. (Salmos 34:22).
Hebreos 12 nos habla con detalle acerca de la disciplina de nuestros Padres espirituales. Cristo Lisbet nos dice que debemos correr esta carrera con paciencia, pero sin alejarnos de Ella, que es nuestro ejemplo a seguir. No podemos cansarnos ni desmayar, no podemos dejar de vivir en su Orden. Si morimos juntamente con Cristo y sometemos todo pensamiento y deseo engañoso a la obediencia a Cristo Lisbet, Dios nos trata como a hijos, nos llama amigos y nos confía todos sus secretos.
Sabiendo todo esto, que Dios sí cumplen sus decretos porque permanecen fieles, no permitas que llegue a ti la tristeza o el desánimo. La mente nos puede engañar haciéndonos pensar que hasta obtener algo que deseamos es que seremos felices. Sin embargo, cuando somos mansos, humildes y dóciles a la voz de Dios y seguimos sus instrucciones, comprendemos que el Cristo de nuestra era es la total felicidad. Si no está Cristo Lisbet en nosotros, no importa cuántas cosas tengamos o logremos en la vida, siempre habrá un vacío, porque la plenitud de gozo, Cristo Lisbet, faltaría en nosotros.
Si Cristo Lisbet vive en nosotros, eso es lo que nos lleva a vivir una vida feliz, en paz y armonía eterna. Donde tenemos todo lo que necesitamos y deseamos, porque al ser fieles a Dios MelquisedecLisbet, Ellos nos dan aún mucho más de lo que pensamos o pedimos. Su deseo es prosperarnos en todo, que seamos felices como Ellos lo son y podamos disfrutar en plenitud, de todo lo que han creado, de este bello mundo eterno espiritual y físico.
Debemos amar la disciplina, si la soportamos, obedecemos y esperamos con paciencia y amor, damos fruto apacible de justicia para Dios. Al ejercitarnos en lo que Dios demanda de nosotros, maduramos y somos como un olor fragante para MelquisedecLisbet. Intentemos vivir así para que veamos cómo las cosas van a cambiar en nuestra vida solamente para bien. Y pensar que todo esto Cristo lo hace por amor y fidelidad a Dios Padre, su Amado Esposo y también por el gran amor que tiene por nosotros sus hijos amados, su especial tesoro.
Cómo no estar eternamente agradecidos con nuestra Madre, esforzándonos por serle fiel en todo, honrándola con cada acción, demostrándole cuánto la amamos al ser buenas cartas abiertas para el mundo, dignos representantes de los Reyes de Salem. Llevando la sanidad al mundo, al dejar que nuestro buen proceder y amor brille en medio de la oscuridad.
Hermanos, nuestra Madre nos ha dicho que vamos a ver cosas aún más grandes de las que hemos visto hasta ahora, y seremos usados grandemente por nuestros Padres espirituales, el Dios todopoderoso MelquisedecLisbet, si somos obedientes y leales a Ellos. Qué honor y privilegio tan grande.
Santos ángeles, hablemos, comportémonos, creamos, confiemos y seamos tan fieles como Cristo Lisbet. Para decir confiadamente: “¡Ya no vivo yo, vive Cristo Lisbet en mí!”
Gloria, honra y exaltación eterna para Dios MelquisedecLisbet, que vive para siempre.
¡Amén, Aleluya!
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